¿Cenar en Madrid?

La última vez que visité Madrid (enero de este año), no pude evitar volver a pasar por aquí.

Si, Streetxo Madrid. Resulta que decidimos ir a cenar pronto para que no nos pillara la hora punta de las cenas. Llegamos a las 20:00 al restaurante, que se ubica en la Calle Serrano, 52, en la parte de arriba del Corte Ingles. Cual fue la sorpresa, que nos encontramos con una cola que recorría las escaleras hacia abajo.

Sinceramente, no podía pasarme por Madrid y no cenar aquí asique esperamos y esperamos hasta que dieron las 22:30 y nos mandaron pasar. La espera mereció la pena sin ninguna duda.

Una experiencia única, un ambientazo increible con la música a todo trapo, la cocina en vivo, el personal joven y con un humor de quitarse el sombrero y un trato estupendo que es de valorar ante la presión de estar en medio de un servicio. La comida...que decir de la comida... una auténtica maravilla.

Pedimos un par de cocktails...

Uno dulce

Y otro ácido con un poquito de rock & roll

¡¡Los dos fabulosos!!

Y ahora damos paso a la comida... te indican que los platos son para compartir, al centro asique nosotros nos decidimos por:

- Dumplin pekinés, oreja confitada y hoisin de fresas. Ali-oli y pepinillo.

Ya lo había pedido la otra vez que fui y me enamoró asique era obligatorio volver a comerlo.

- Caballa "frita al revés" con pimienta sichuan, huevas de trucha y ponzu cítrico. "Ajíblanco" "lima-lagueño" y papas moradas fritas.

Con aceite bien caliente echan un pequeño chorro sobre la caballa para acabar de hacerla y te lo terminan de emplatar delante de ti.

-"Saam" de panceta ibérica a la brasa. Condimento de mejillones escabechados. Shitakes encurtidos. Salsa sriracha y tártara "xo".

Otro espectáculo de sabores. La panceta hecha al josper una brutalidad.

- Civet blanco de jabalí. Noodles fritos al wok y bacon extraahumado. Huevo frito con puntilla.

Bueno, podeis imaginar como estaba...

Y para terminar 

- Cordero de lechal tandori a la llama de sarmiento con causas limeñas de patata, trufa de verano y trompetas de los muertos.

En resúmen, parada obligatoria en Madrid porque es una experiencia completamente diferente a lo que puedas encontrar en otro sitio. El ambiente, el buen rollo, la comida...

No vayas pensando en lo que vas a gastar. Es un sitio para sentarte y disfrutar porque os aseguro que cuando termines, el precio va a ser lo de menos.

 A ver si a lo largo de esta semana soy capaz de poder subir algún vídeo a la página de Facebook para que podais verlo.

Espero que os sirva de referencia y anoteis un nuevo sitio para vuestra próxima visita a Madrid.

Hasta pronto cacitos y sartenitas :)